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Familia Martínez Bujanda destaca la gran calidad de la cosecha 2016

La producción media en Finca Montepedroso (Rueda) fue de 8.000 kg/ha, de 6.500 kg/ha en Finca Antigua (La Mancha) y de 5.200 kg/ha en Finca Valpiedra (Rioja), todas ellas por debajo de las máximas autorizadas.

Madrid, 29 de noviembre de 2016. – Familia Martínez Bujanda, histórica familia de bodegueros de Rioja, destaca la gran calidad de la añada de 2016 en Finca Valpiedra (Rioja) y en Finca Montepedroso (Rueda). La añada ha sido excelente tanto cuantitativa como cualitativamente y los primeros vinos con los que están trabajando muestran perfiles muy aptos para la crianza y la elaboración de vinos de alta gama. Por otra parte, en Finca Antigua (La Mancha) ha sido un año positivo, aunque no ha alcanzado el nivel de las otras Denominaciones de Origen.

La Rioja, una larga recolección

La cosecha en la D.O.Ca. Rioja ha sido muy buena, tanto en calidad como en cantidad, prolongándose durante prácticamente dos meses (hasta primeros de noviembre), mientras que la de 2015 se había caracterizado precisamente por ser la vendimia más temprana y rápida que se recordaba en la región. En total, se han recogido 442,4 millones de kilos de uva, en una añada marcada por la buena climatología que ha acompañado todo el proceso de recolección.

En Finca Valpiedra la vendimia fue muy tranquila, escalonada y con la selección del momento ideal para cada parcela, según iban madurando las uvas: “La sequía, por la falta de las tradicionales tormentas de agosto, marcó el año y nos encontramos con racimos y bayas pequeñas de calidad excepcional desde el primer momento”, explica Lauren Rosillo, director técnico de Familia Martínez Bujanda.

Rosillo considera que la de 2016 es una de las mejores vendimias que ha conocido Valpiedra, “al nivel incluso de la del 2010”, y la clave fundamental ha sido la labor previa de viticultura, desde la poda, a las descargas de racimos que han permitido que, pese a la sequía, la planta no llegara a colapsarse en ningún momento. El rendimiento medio de la finca ha sido de 5.200 kilos por hectárea, muy por debajo de los 6.955 kilos autorizados por el Consejo Regulador para esta campaña, pero a la vez, uno de los mayores rendimientos en la finca de los últimos años.

Rueda, cosecha récord

En cuanto a D.O. Rueda, la vendimia ha sido muy productiva con una cosecha récord de casi 100 millones de kilos de uva recogidos. La cosecha ha sido más tardía que el año pasado, pero con resultados de gran calidad y un óptimo estado de las uvas.

En Finca Montepedroso, una bodega rodeada de 25 hectáreas de viñedo en una meseta a 750 metros de altitud, el rendimiento medio ha sido de 8.000 kilos por hectárea, muy por debajo de los límites de la Denominación de Origen (10.000 kilos por hectárea para verdejo).
“La maduración ha sido completa y muy positiva, con acidez y mucha concentración de aromas en las uvas, con lo que estamos ya elaborando un gran Montepedroso”, señala el director técnico de Familia Martínez Bujanda.

Castilla-La Mancha, recolección más tardía

Por su parte, la cosecha en Castilla-La Mancha en general ha terminado también con unos considerables niveles de calidad, la campaña fue más tardía que la anterior. Desde un punto de vista cualitativo, las uvas muestran un equilibrio analítico y un estado sanitario satisfactorio.

En Finca Antigua, los rendimientos de la vendimia han sido 6.500 kilos por hectárea, pese a que, a nivel general, la denominación de origen sufrirá una merma de alrededor del 20%.

La causa se encuentra en la naturaleza de Finca Antigua, con sus casi 900 metros de altitud y la tremenda amplitud térmica entre día y noche que, junto con la vendimia en verde y la labor de viticultura, permiten que “la sequía no afecte excesivamente a la planta y la rápida maduración alcohólica viniese acompañada de la madurez fenólica”, explica Rosillo.

“En líneas generales -concluye Lauren Rosillo-, tanto esta campaña como las anteriores, las marca el trabajo de viticultura, el control de las producciones y la vendimia en verde: la maduración fenólica acompaña a la alcohólica cuando se controlan los rendimientos, cuando las plantas están equilibradas entre racimos y vegetación, de forma que, aun con sequía, siguen trabajando hasta el final del ciclo”.

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